Si pudiéramos mirar en el corazón del otro y entender los desafíos a los que cada uno de nosotros se enfrenta a diario, creo que nos trataríamos los unos a otros con más gentileza, paciencia, tolerancia, y cuidado.
Cuando sientas ganas de criticar a una persona piensa que no todos han tenido las mismas oportunidades que tú.
No juzgo, no critico y no condeno.